La pregunta.

Cuantas veces nos agotamos con preguntas sobre la vida. ¿Preguntas a las que parece que no podemos encontrar una respuesta simple?

¿como que quiero?

¿Es esto lo correcto?

¿Cuál es el propósito de mi vida?

La vida está llena de incertidumbre y si no estamos presentes, podemos perdernos en el momento. Pero, ¿y si hubiera una pregunta que pudiéramos hacernos que destacaría la respuesta que estamos buscando? Algunos de ustedes pueden tener métodos o un conjunto de rituales que los ayuden a simplificar la vida, otros pueden estar buscando métodos o rituales que los ayuden a anclarse en el momento presente. Comparto una pequeña pregunta efectiva que todos podemos hacernos para encontrar la respuesta en un momento dado. Pero primero, aquí está la cita que inspiró esta publicación de blog.

Un sabio dijo una vez: “En la vida debemos elegir nuestros arrepentimientos”. – Desconocido

SOLO IMAGINA…

Imagina tener 80 años y estás acostado en tu lecho de muerte con dificultad para respirar. Los órganos vitales se ralentizan. En realidad, trata de imaginar cómo se ve eso. ¿Cómo es la habitación? ¿A qué huele? ¿Te visita mucha gente o estás solo? ¿Tienes miedo o estás en paz? ¿Estás en un hospital o estás en casa? ¿Eres rico o eres pobre? Puede ser difícil visualizar eso porque no sabemos lo que nos depara el futuro.

Estás en el punto de no retorno e imagina darte cuenta de que te estabas haciendo la pregunta equivocada todo el tiempo.

DEJA QUE ESTO SE HUNDA EN TU MENTE…

Hacerse preguntas como “¿cuál es mi propósito en la vida?” a menudo conducen a más preguntas. La vida se trata de elecciones y si elegimos nuestros arrepentimientos, entonces surge la pregunta.

¿Con qué arrepentimiento no podemos vivir?

Esta pregunta es tan poderosa y profunda que puede encaminarte hacia donde debes estar. Me gustaría enfatizar que el objetivo final en la vida es no arrepentirse. Aceptar y perdonar es esencial para una vida feliz. La vida te presentará diferentes desafíos que ayudarán a cincelar tu carácter. Pero eso es todo, los desafíos y cuando surgen, ya sabes qué preguntas hacer.

¿Qué arrepentimiento voy a elegir? ¿Con qué arrepentimiento no puedo vivir?